Fundamental en el proceso de curación de cada pieza, la sal. En principio solo podemos manejar el grado de salazón que tendrá la pieza en el periodo de salazón, cuando los jamones se cubren completamente de sal, para absorber toda la humedad de la pieza, evitando así la formación de microorganismos que puedan echar a perder la pieza.
Claro, que hay que controlar el tiempo que van a pasar las piezas en la fase de salazón, y cuanta cantidad de sal se va a utilizar para el proceso. Teniendo en cuenta que una vez superada esta fase, ya no se puede corregir el punto de sal de cada pata, hay que tener muy claro los datos expuestos antes, es decir, el tiempo y la cantidad. El jamón estará cubierto de sal y se mantendrá en la capa externa, pero poco a poco se irá filtrando hacia la carne, por lo que se debe tener cuidado en la no excesiva exposición de la pieza en este elemento.
Es fundamental tener el punto justo de sal, ya que, como hemos comentado al principio de este artículo, para los que no tenemos un olfato exquisitamente entrenado, la primera percepción real del aroma del jamón lo haremos al introducirlo en boca durante la masticación.
Si el jamón está pasado de sal, el sabor y por lo tanto su olor no será agradable, lo que no permitirá que apreciemos los toques dulces de su carne. Y su sabor será desagradable. Pero esto ya pertenece a otro de los sentidos que abordaremos más adelante.
Para concluir, no queremos dejar de comentaros y cómo ya os habréis dado cuenta, que cada pieza de jamón tiene un olor único, aunque pertenezcan al mismo cerdo o se haya curado de la misma forma y tiempo. Cada pata tiene una cantidad propia de grasa infiltrada y por lo tanto, tendrán una curación única. De ahí que el aroma de cada uno sea único.
Con estos datos, deberíamos, una vez entrenado el olfato, poder distinguir oliendo un jamón, si es ibérico de bellota tener un toque a azúcar quemado y tostado, caramelo, frutos secos, como la nuez, la avellana, a madera, pan tostado, a bodega, canela, vainilla…
Si no eres capaz de distinguirlos, no te preocupes, estás dentro de la mayoría de la población, pero con estos datos, ya puedes empezar a entrenar tu olfato.
Y para ello, nada mejor que comenzar con una de las piezas que te ofrecemos en nuestra página web. Puedes visitarla aquí.
¿Has perfeccionado ya tu olfato?